La edición de 2011 del Tour de Francia tuvo un líder sorprendente durante gran parte de su trascurso: Thomas Voeckler. El ciclista galo fue la sensación del Tour, haciendo que los franceses se volviesen a ilusionar al ver a uno de los suyos luchar por el triunfo final.
Thomas se enfundó el amarillo tras participar en una larga escapada en la novena etapa. Lo que a priori no suponía ningún contratiempo para los grandes favoritos al podium de París, se terminó convirtiendo en un grave problema. Con Voeckler se probó como cierto aquello de que "el maillot amarillo da alas". Corriendo muy por encima del nivel que se le esperaba, Thomas defendió estoicamente su maillot hasta que Andy Schleck logró arrebatárselo...
Thomas se enfundó el amarillo tras participar en una larga escapada en la novena etapa. Lo que a priori no suponía ningún contratiempo para los grandes favoritos al podium de París, se terminó convirtiendo en un grave problema. Con Voeckler se probó como cierto aquello de que "el maillot amarillo da alas". Corriendo muy por encima del nivel que se le esperaba, Thomas defendió estoicamente su maillot hasta que Andy Schleck logró arrebatárselo...
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