sábado, 7 de abril de 2012

Preparación Media Maratón (I). Introducción.

Me temo que con esta serie de entradas me saldré un poco de la temática del blog y de lo que venía publicando hasta ahora. Pero qué coño, por una vez diré eso de "este es mi blog, y estas son mis normas". Así que si tras esto decidís no volver a visitarme, estaréis en todo vuestro derecho.

Pues bien, con estas entradas pretendo ayudar a todo aquel al que le haya picado el gusanillo del running y se haya planteado algún reto en forma de carrera. Yo fui (y soy) uno de ellos. Por motivos que no vienen a cuento, hace aproximadamente un año empecé a salir a dar una vueltilla corriendo al atardecer. Cada dos o tres días repetía la costumbre, siempre y cuando los estudios, y las piernas, me lo permitían. Era mi momento de desconectar de la rutina, ponerme los cascos con mi música, y olvidarme de todo. Y lo que en un principio eran 20 minutos, poco a poco se convirtió en media hora, más tarde en tres cuartos de hora.... así hasta que un día me pregunté: ¿sería capaz de terminar una media maratón?

Hablamos de 21 km corriendo. 21097 metros para ser más exactos. Algo que para mi, acostumbrado a rodar alrededor de 5 kilómetros y verme obligado a parar antes de sufrir un infarto, era una locura. Y sin embargo, el tiempo me demostró que todo es cuestión de proponérselo e intentarlo.

Realicé la primera tentativa con una distancia similar a finales del pasado verano, cuando completé unos 20 kilómetros en un tiempo próximo a las dos horas. Dejaremos para otro momento el hablar sobre las agujetas que arrastré en los días posteriores a aquello. Pero me daba absolutamente todo igual: había conseguido mi objetivo.

La transición de los meses de otoño fue un absoluto vacío en mi preparación, perdiendo toda la forma física adquirida en verano. Varios catarros, gripes y resfriados mal curados; unidos a una herida bastante profunda que me hice en la pierna derecha, consiguieron que hasta finales de diciembre no saliese más que un par de veces más a correr.

Pero fue con la entrada del nuevo año cuando todo volvió a cambiar. Uno de esos propósitos que todos nos planteamos y casi nunca cumplimos. Sólo que en este caso si. El anuncio de la celebración de la primera Media Maratón de la Ciudad de Salamanca me llevó a tomar la decisión de volver con la rutina del entrenamiento. La cita, el domingo 4 de marzo de 2012. Tenía poco más de dos meses para prepararme. Muy poco tiempo para prepararme bien, demasiado tiempo para quemarme preparándome mal. Y además, todo ello con la época de exámenes en medio. Sonaba, cuanto menos, como un reto apasionante.




Y he aquí el punto en el que planifiqué toda mi preparación de cara a la carrera. Es éste un aspecto fundamental. Gran parte de nuestro éxito o fracaso vendrá determinado por ello. Y para no cometer errores, hay una serie de puntos y aspectos fundamentales que todos debemos conocer y tener en cuenta. El propósito de esta serie de entradas será justamente ese, prestar mi pequeña ayuda a todo aquel interesado en aprender algo al respecto de esta preparación.

1 comentario:

  1. En tu blog hablas de lo que quieras,está claro, de lo que hablas es de superación por lo que es muy interesante, saludos

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