Sin lugar a dudas, ese podría ser el titular y el perfecto eslogan de esta Vuelta. No estarán en esta edición ninguno de los corredores que lucharon por la victoria en el pasado Tour, ya sea los arriba mencionados u otros como Samuel Sánchez o Ivan Basso. Y sin embargo, no habrá motivos para echarlos en falta.
A los corredores que lucharon en el Giro como Nibali, Scarponi, Menchov, “Purito” o Antón; se les unirán todos aquellos perjudicados por la plaga de caídas de la primera semana del pasado Tour: Wiggins, Brajkovic, Kloden o Van den Broeck. Ciclistas todos ellos que estaban llamados a pelear por un puesto en el podium de París, y que no dejarán escapar la oportunidad que ahora se les presenta.
Vincenzo Nibali: tras repetir en mayo la tercera posición lograda en la temporada pasada en el Giro de Italia, el italiano se presenta en Benidorm con ese mismo objetivo: repetir su posición en la general de la ronda española, y alzarse así con la victoria final. El italiano quiere convertir España en su territorio talismán, y para ello no ha dudado en guardar fuerzas y recuperarse de los esfuerzos de la ronda italiana.
Echará mano de sus mejores armas: su resistencia y regularidad. Aunque no disponga de las características adecuadas para ser él quien rompa la carrera, estará siempre entre los mejores. Su equipo, el Liquigas, se presenta en esta edición con el claro objetivo de ayudar a Vincenzo en la lucha por el triunfo final. Y ello no sin olvidarnos de que su compañero, el joven Sagan, luchará por varios finales de etapa.
Igor Antón: vuelve con ganas de rematar la faena que el año pasado no pudo terminar por culpa de una caída. Tras un Giro agridulce, en el que a pesar de la gran victoria conseguida en el Zoncolan no pudo aguantar con los mejores en la general, se presenta tal vez algo justo aun de forma como pudimos observar en la Vuelta a Burgos. El paso de los días debería contar a su favor.
Los puertos de duros porcentajes, como el Angliru o la Farrapona, le favorecen, aunque la crono de Salamanca puede restarle muchas de sus opciones. Se presenta en esta edición como el líder del Euskaltel secundado por un Mikel Nieve que no dudará en coger el testigo de Igor si éste fallase. Otros corredores como Egoi Martínez, Iñaki Isasi o Amets Txurruka, conforman un equipo que tratará de controlar y luchar por la victoria en las etapas de montaña.
Joaquim Rodríguez: llega con la lección aprendida de la temporada pasada, donde su empuje y ganas por conseguir el maillot rojo, le terminaron resultando caros. Busca así su primera “grande”, convencido, ahora ya si, de poder lograrlo. Y todo ello sin olvidarse tampoco del objetivo de alzarse con una victoria parcial en alguno de los muchos finales explosivos de este año.
Llega en un fantástico momento de forma, pero no puede permitirse una pérdida de tiempo como la del año pasado en la crono. Desde su equipo se le convenció para que esta temporada no disputase el Tour y poder participar así con mayores garantías en las otras dos grandes. Dani Moreno, como ambos ya demostraron en la pasada Vuelta a Burgos, será su hombre de confianza dentro de su equipo, el Katusha ruso.
Michele Scarponi: demostró en el pasado Giro que tiene la fuerza y el valor suficiente para dejar su nombre escrito en el palmarés de alguna de las grandes. Y así lo hubiese hecho en mayo si en su camino no se hubiese cruzado Alberto Contador. No llega en la misma forma que al Giro, pero debemos tener claro que si las piernas le responden, Scarponi no dudará en tratar de romper la carrera en cuanto se le presente la oportunidad.
La crono de Salamanca corre en su contra, pero el hecho de que ésta se encuentre en el primer bloque de competición y alejada de Madrid, cuenta a su favor: tendrá montaña y finales explosivos suficientes para recuperar todo el tiempo que pueda perder.
Bradley Wiggins: se presentó en el Tour de este año tras una gran Dauphine y teniendo muy claras sus opciones de luchar por una posición en el podium final de los Campos Elíseos. Sin embargo, una caída en la primera semana de competición, echó por el suelo toda su meticulosa preparación. Ahora tendrá su reválida particular en esta Vuelta.
Su estado de forma es una duda, al igual que su motivación: no se sabe hasta que punto está centrado en lograr el triunfo final o se encuentra inscrito en esta Vuelta por simple y mera obligación de su equipo tras su nulo Tour de Francia. Deberá explotar en la crono de Salamanca, ya que le resultará difícil no perder tiempo frente a los escaladores en el resto de montaña de esta edición.
Jurgen Van den Broeck: una fractura de omóplato hizo que abandonase el pasado Tour, y llega a la Vuelta en busca de una nueva oportunidad. De nuevo, su estado de forma y motivación real son una duda que no resolveremos salvo con el paso de los días de competición. El recorrido le resultará muy favorable, y puede ser esta carrera una ocasión única para él.
Janez Brajkovic: llega a la Vuelta compartiendo el liderazgo del RadioShack con Andreas Kloden. Y ambos llegan también en una situación similar: tras enfocar sus temporadas en el Tour, las lesiones les dejaron fuera de la lucha por la general, obligándoles a abandonar.
Janez y Andreas tendrán en esta Vuelta su particular examen de recuperación. Al igual que su equipo, aun con los deberes por hacer esta temporada. Y para solucionar esta situación, no han dudado en traer a sus mejores hombres: los dos ya mencionados encabezan una lista con otros grandes ciclistas como Tiago Machado, Robert Hunter, Sergio Paulinho o Haimar Zubeldia.
Denis Menchov: tras la decepción del pasado Giro, en el que consiguió alcanzar la forma adecuada demasiado tarde como para solventar las diferencias que le impidieron luchar por la general, el ruso comenzará esta Vuelta con el papel de “tapado”. No son muchos los que cuentan con él, pero sin embargo ha enfocado su preparación con la vista puesta en esta cita, ahorrándose muchos esfuerzos en el camino.
El recorrido se adapta bien a sus características, pero su punto fuerte será su equipo. El Geox, tras no ser incluido en el pasado Tour y haber realizado un año con más penas que glorias, llega a esta edición de la Vuelta con hambre, y necesidad, de victorias importantes. Y para ello contarán además con Carlos Sastre y Juanjo Cobo, que no dudarán en echar una mano al ruso. O puede que incluso estén capacitados para metas mayores.
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