Hoy, sábado 3 de septiembre, la etapa comenzará en suelo leonés, en la localidad de Astorga. Con un comienzo sencillo, tras algo mas de 100 kilómetros se presentará la primera dificultad, el Puerto de la Ventana de segunda categoría. La dificultad irá en aumento, y tras un largo descenso se llegará al Puerto de San Lorenzo, de primera, que enlazará a su vez con el alto de la Farrapona, final de la etapa. Se trata este último puerto de una ascensión de categoría especial, inédita en la Vuelta hasta esta edición. Con casi 17 kilómetros de longitud, el puerto presenta unos pocos kilómetros de descanso pasado su ecuador, a partir de los cuales comienzan las rampas mas duras con casi cinco kilómetros con una pendiente media en torno al 10%.
Es probable la formación de alguna fuga grande en los primeros kilómetros de la etapa, aunque su llegada a meta no será sencilla al haber demasiadas cosas en juego por detrás. La Farrapona puede marcar diferencias importantes, y ello sin olvidarnos además del botín de las bonificaciones para los mejor clasificados en meta.
Y para mañana, la organización de la Vuelta nos trae la cima mas mítica del ciclismo español, el Alto del Angliru. Tras la ascensión previa a los altos de Tenebredo (2ª categoría) y el Cordal (un primera corto pero muy exigente, con un descenso peligrosísimo), el pelotón afrontará el coloso asturiano. Un puerto que desde su inclusión en la Vuelta de 1999, con la victoria conseguida por el Chava Jimenez y el espéctaculo que aquella ascensión bajo la niebla y la lluvia brindó, se ha convertido en toda una referencia para los amantes de este deporte. Con 13 kilómetros de ascensión, y a pesar de presentar unos kilómetros iniciales mas tendidos, el puerto presenta rampas superiores casi en todo momento al 10%, con algunos tramos de ascensión superiores al 20% (la temida "Cueña les Cabres").
La etapa la marcará el Angliru, aunque la carrera podría endurecerse previamente en el paso por el Alto del Cordal. Su descenso, ya peligroso de por si, podría jugar un papel muy importante gracias al factor de la meteorología: se esperan nubes y alguna tormenta que convertirían la bajada en un tramo de alto riesgo. Un terreno que se convertiría en el ideal para que un especialista como Nibali lo probase.
Con esta descripción de lo que nos queda por delante para este fin de semana, no podemos hacer otra cosa mas que estar atentos al televisor. Y mucho mas aun tras ver los ánimos del pelotón en la etapa de ayer, donde en la ascensión al Puerto de los Ancares, y a pesar de la lejanía aun de la meta, fueron varios los hombres de la general que lo intentaron. Nibali, Purito, Mollema, Kessiakoff, Dani Moreno... son todos ellos corredores que estarán obligados a intentar dejar atrás a Bradley Wiggins durante estos dos días, en un terreno que, a priori, es desfavorable para el líder británico.
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