domingo, 17 de marzo de 2013

Comienza la primavera ciclista



  Llega marzo, llega la primavera. Y el mundo del ciclismo no iba a ser una excepción. Llega este domingo la Milan-San Remo, la“Classicissima”, que servirá de arranque a la primavera ciclista de las grandes clásicas.
   Con 298 km, estamos ante una de las mayores pruebas de resistencia del calendario ciclista profesional, en la que, irónicamente, serán la velocidad y la fuerza los factores decisivos que decidirán la victoria en los últimos kilómetros. El Poggio, un puerto de estrechas carreteras con algo menos de 4 kilómetros de longitud, será el punto clave de la carrera y la última opción para evitar una llegada al sprint. Desde su cima quedarán ya sólo 6 kilómetros a meta, la mitad de ellos parte de un técnico descenso en el que los más valientes arriesgarán para buscar la victoria.


  Entre los favoritos destaca el nombre de Peter Sagan. Sus exhibiciones en la Tirreno-Adriático, clara muestra del gran momento de forma que atraviesa, unidas al potente bloque que presenta su equipo, el Cannondale, lo convierten en candidato evidente a la victoria en la meta de Lungomare Italo Calvino. Nibali, Cancellara (herido tras haber regalado la victoria en las últimas dos ediciones), Chavanel, Boasson Hagen y Gilbert serán seguramente los encargados de tensar y romper la carrera en el Poggio. Todo ello con el fin de evitar una llegada masiva, en la que poco podrían hacer frente al grupo de sprinters, encabezado por Cavendish, Greipel, Farrar y Degenkolb. Y tampoco podemos olvidarnos en ningún momento del trío que forman Gerrans, Goss y Pozzato, los tres ya vencedores de esta clásica, y que saben moverse a la perfección en este tipo de prueba. 

   De los españoles, nos quedamos con la dupla del movistar formada por Rojas y Ventoso, así como con el incansable batallador que es Juan Antonio Flecha. No obstante, será el nombre de Óscar Freire, ya retirado y ganador en 2004, 2007 y 2010, el que más echaremos en falta en la que era una de sus pruebas talismán.